Escuchando la radio esta tarde me topé con una de esas semi promesas de tiempos electorales que nos están soltando de vez en cuando, casi subliminalmente. Y oí a un líder de masas, al santo patrón de los patos fénixes, vociferando con su característica grandilocuencia acerca del camino a la democracia social, nuestra cercanía a él y demás maravillas oratorias.
Y yo no pude más que preguntarme... ¿y eso con qué se come? ¿La democracia, desde un principio incluso etimológico, no es social? ¿No es el gobierno de (por) los demos, o pequeños pueblos?
Es como todo el rollo del socialismo del siglo XXI. Me parece maravilloso que una institución ideológica tan establecida y formalizada como lo es el socialismo evolucione, pero a mí nadie me ha explicado todavía en qué se basa dicha evolución, o de dónde viene, o cómo fue probada, desprobada, o si somos la experiencia piloto. A mí me suena que tiene algo que ver con el Manifiesto Comunista comprimido en un torrent y, como dice una amiga, presentado al público con "tecnología de punta"... o sea, una computadora con conexión dial-up, muchas gracias.
A veces tengo la impresión de que nos venden unas ideas fantásticas que ni los mismos políticos comprenden. Casi me parecería más honesto que alguien introdujera uno de esos ultra súper planes socio políticos diciendo "¡y aquí la democracia social, el sistema político en boga en la tierra de los unicoooornios! ¡Miren, miren, BRILLA!"
Quizá si incrementamos nuestra ingestión de hidrocarburos entenderemos ciertos pensamientos que, de otra forma, estamos demasiado desconectados intelectualmente para comprender... o, quién sabe, puede que simplemente estemos demasiado sobrios u, ¡atemoricémonos!, demasiado cuerdos.
La tierra de los unicornios
Publicado por
BabeDeJour
martes, 28 de octubre de 2008
2 comentarios:
¡ESO! A ESO era a lo que yo me refería con echar tu ácido en el blog. Excelente entrada. ¡Celebro su regreso, chicas!
Por ahí supuestamente hay un libro sobre el socialismo del siglo XXI en el cual se basaron los unicornios rosados invisibles para poder hacer que el monstruo de espagueti volador desarrollara su ideología pro piratas. Pero qué se yo. Es dificil que yo toque un libro político. Se que debería, pero se me hacen tan duros como los libros de Jack London.
¡Besos!
Lo que pasa es que Miraflores es Candy Mountain u_u
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